Continuamos en dirección Sur, bajando hacia la ERMITA DE SAN ROQUE, construida en el siglo XVIII, única Ermita que queda en el municipio de otras muchas que hubo a lo largo de la época moderna como fueron el caso de San Sebastián.
Rinde culto al Patrón de Siles, San Roque, donde se alberga el Caldero donde se cumple cada 15 de Agosto la tradición de sacrificar una res brava para darla en caridad a los vecinos y visitantes en honor y agradecimiento al Patrón que protege a esta localidad.
Como podemos ver una vez situados aquí, está situada lejos del centro histórico y de lo que es el Cubo, esto es debido a que en la ideología de la Edad Moderna, era un lugar de peregrinaje y donde generalmente se curaba a enfermos. Miles son las peticiones que a San Roque le habrán llegado desde la institución de su fiesta y patronazgo junto con la asunción.
La característica de la Ermita son básicas al ser propia del mundo rural. Está compuesta de una sola galería con bóveda de madera en transepto, con un retablo principal construido de ladrillo en el que se insertan bajo la presidencia del patrón otras imágenes y hay un retablo en honor a otro Santo ligado al mundo rural como en San Isidro Labrador.